¡Mírala toda ilusión! Esta vez sí que se ha portado, y a juzgar por el envoltorio es el mayor regalo que jamás le ha hecho. Y mira con qué felicidad lo desenvuelve, y cómo lo besa a él, y seguro que está diciendo emocionada qu...
- Ya nunca hacemos nada juntos. Ni siquiera hablar. Llegas tarde a casa y te atrincheras detrás de esas páginas. Que estoy segura ni siquiera lees, te veo siempre mirando afuera, de reojo, observando a la gente a través de la ventana...
- ¿Has escuchado? "El estado español aprueba el divorcio" Qué retraso...
Qué retraso... Seguro que decía emocionada... "¡Qué hermoso regalo!"
Y así continuaban aquella magistral simulación de pareja, mostrando cada cual sus encantos.
- Ya nunca hacemos nada juntos. Ni siquiera hablar. Llegas tarde a casa y te atrincheras detrás de esas páginas. Que estoy segura ni siquiera lees, te veo siempre mirando afuera, de reojo, observando a la gente a través de la ventana...
- ¿Has escuchado? "El estado español aprueba el divorcio" Qué retraso...
Qué retraso... Seguro que decía emocionada... "¡Qué hermoso regalo!"
Y así continuaban aquella magistral simulación de pareja, mostrando cada cual sus encantos.
2 comentarios:
Me encanta eso de que una ventana sea una galería, donde una pareja posa sus miserias, y sus virtudes.
Un buen regalo, este que nos dejas.
Gracias por asomarte conmigo a esta ventana que se nos ha abierto y que Hopper plasmó tan genialísimamente en esta pintura. El regalo es también para mí que te guste.
Publicar un comentario